
Una palabra…
más filuda que la espada
sangra a través
de pensamientos
Aleatoriamente
corta los sueños,
a silabas…
destaja venas y sonrisas.
La oscuridad
ha descendido…
el dolor,
se sienta
sobre su vanidad.
…aquí, en este lugar
la compasión
es un mito…
se enmarca,
de agonía.
Que flamea
sobre tus ojos
bajo el influjo
que muele inalterable
un quejido.
Oculto,
tras el brillo
de sus labios…
y la ira
no sabe de límites.
Entonces, el olor
de la desesperanza
se hace…
gruesa en el aire
y sin embrago
aún respiras…
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